Imagen
Imagen
Imagen
Imagen
Imagen

ASESINADO ESPOSO DE LA CONSEJERA MAYOR.

A las 4 de la mañana del día de hoy, efectivos del Ejército Nacional dispararon sin piedad sobre la camioneta del CRIC, vehículo en el que se desplazaba una misión médica procedente del municipio de Inzá Tierradentro, conducida por Edwin Legarda Vázquez, esposo de la Consejera Mayor del CRIC, Aida Quilcué. El comunero Legarda recibió dos impactos de bala, uno de los cuales en la parte derecha del pecho y murió a las 8 a.m. en el Hospital San José de Popayán.


El vehículo del CRIC, que es ampliamente conocido por sus viajes en esa vía, fue atacado por tres costados y presenta 17 impactos de fusil, en una clara acción de guerra del ejército colombiano contra la población civil y concretamente contra los pueblos indígenas. Los hechos ocurrieron en la Vereda San Pedro, el Bosque, sitio San Miguel, del Municipio de Totoro, Cauca.


La Consejera del CRIC, al analizar las circunstancias del asesinato de su esposo, ha denunciado este hecho como un acto premeditado que en realidad la tenía a ella como objetivo. Aida Quilcué ha recibido múltiples amenazas y su riesgo aumentó a raíz de sus denuncias nacionales e internacionales sobre la violencia contra los pueblos indígenas y los asesinatos en el desarrollo de la Minga Nacional.


Luís Evelis Andrade Casama, Consejero Mayor de la ONIC ante estos hechos señaló que el atentado contra el CRIC es un atentado contra la ONIC, el Movimiento Indígena colombiano y contra todos aquell@s que nos atrevemos a proponer cambios desde el sentir de los pueblos.


Con este asesinato aleve, se ratifica una vez más por el Estado colombiano que matar indios y líderes sociales es un componente de la seguridad democrática, tal y como se demostró durante la minga de resistencia en donde también fuimos colocados como carne de cañón por la fuerza pública. A estos delitos de Estado luego se les coloca nombres como falsos positivos o “acciones aisladas de personas que no comprometen a la institución” pero que en realidad forman parte de una masacre contra el pueblo colombiano.


La guardia indígena en este momento se ha desplazado hacia la vereda de san Pedro, y no permitirá que quienes han asesinado a nuestro compañero y atentado contra nuestra organización, abandonen el sito sin denunciar a los verdaderos móviles y los autores materiales e intelectuales de este hecho criminal.


Llamamos al pueblo colombiano y a la comunidad nacional e internacional para que se rodee a nuestra organización y nuestros pueblos y no se permita que continúe la impunidad y la masacre.


CONSEJERIA MAYOR DEL CONSEJO REGIONAL INDIGENA DEL CAUCA-CRIC